La mentira del tráfico orgánico y el SEO en Google Analytics

Como sabes, en Google Analytics, en los informes de «Adquisición» y «Canales» podemos ver de dónde proviene el tráfico que visita nuestro sitio.

Entre otros podemos encontrar «Social media«, «Email, «Directo» y «Búsqueda orgánica«. Pues bien, muchos analistas tienden a pensar que las visitas que provienen de «Búsqueda orgánica» son visitas por SEO, cuando esto es un gran error.

Las visitas a través de «Búsqueda orgánica» solo indican que provienen de Google, de forma mayoritaria, pero no tiene nada que ver con el SEO. Los analistas que piensan que cuando las visitas por este canal aumentan es porque están haciendo bien el SEO se equivocan gravemente.

El SEO consiste en que nuevos usuarios nos descubran y visiten nuestro sitio a partir de las búsquedas de ciertas palabras clave. Por ejemplo: un usuario busca «product designer«, como resultado le sale esta web, hacen click en el enlace y visitan la página. Esa visita se queda registrada por Analytics como visita que proviene de «Búsquedas orgánicas» y está bien.

Pero ¿qué ocurre si alguien busca «Product Designer Academy»? A todas luces este usuario nos conoce. No nos está descubriendo. Simplemente está buscando nuestra web porque no recuerda la url. Pero para Analytics, esa visita será computada como visita de tráfico orgánico, cuando realmente es que alguien ha usado el navegador para ir a mi página. Y esa visita no tiene nada que ver con SEO, sino con branding. Es decir, una búsqueda de marca.

Por tanto, recordad cuando estéis analizando estos datos que las visitas que provienen de búsquedas orgánicas pueden ser por SEO o por branding.

Para descubrir cuales son por SEO realmente tendremos que usar Google Search Console, ver los términos de consulta que no sean de branding y cruzar esos datos con Analytics.

Cómo mejorar el SEO de tu contenido editorial gracias al LSI

El marketing de contenidos

El marketing de contenidos tiene dos objetivos fundamentales: primero aportar valor a tu audiencia, y segundo, crear contenido que pueda ser encontrado con el paso del tiempo por nuevos usuarios. De ahí la importancia del SEO y del marketing de contenidos de cara a la captación de nuevos usuarios que nos descubran cuando busquen contenido relacionado con el que nosotros creamos.

El SEO hoy día

Mucho ha cambiado el sistema con el que Google clasifica el contenido de la web. Hace unos años, bastaba con añadir en el head de una página un listado de keywords, para que Google indexara nuestros sitio para dichas palabras clave. Hoy día todo es muy diferente.

Ahora Google lee nuestro contenido no sólo buscando las palabras clave con las cuales relacionar nuestro contenido, sino términos relacionados con esas palabras clave. Y aquí, en este punto, es donde nace el LSI.

¿Qué es el LSI y cómo puede ayudarme a posicionar?

Las siglas LSI vienen de Latent Semantic Indexing, y es la tecnología que utiliza Google ( y que va a seguir mejorando en el futuro) para determinar la temática e importancia o valor de tu contenido, y no es otra cosa que los términos relacionados que encuentra en tus sitio.

Para nada mejor para entenderlo como un ejemplo: imagina que estamos creando un artículo que queremos posicionar para el término «Iker Casillas«. Pues en lugar de repetir el número máximo de veces la palabra «Iker Casillas«, debemos añadir contenido que Google «espera encontrar» para ese término, como por ejemplo: Sara Carbonero, Oporto, Real Madrid.

Por así decirlo: tenemos que añadir términos secundarios que den contexto y verifiquen la palabra clave principal que nos interesa posicionar.

Ejemplo de aplicación práctica del LSI

Hay una forma muy sencilla de detectar estas palabras relacionadas que Google espera encontrar en nuestro contenido para una palabra clave. Imagina que quieres posicionar la palabra clave «diseñador de producto digital». Pues bien, escribe esa palabra clave y observa las «sugerencias» que te propone Google para completar el término:

Recomendaciones de Google para una palabra clave
Recomendaciones de Google para una palabra clave

Como veis en la imagen anterior, un término relacionado a esta palabra clave es ‘UX‘, algo bastante interesante y que nos puede ayudar a analizar cómo Google relaciona ambos términos de cara a una estrategia de posicionamiento.

Marketing para Product Designers

Tenemos la tendencia a acordarnos de Mad Men cuando hablamos de marketing. O peor aún, en relacionar el marketing con la oscura persuasión, con el engaño, con la exageración, con algo molesto.

Cuando diseñamos o desarrollamos nuestros productos pensamos que van a llegar a nuestros usuarios de forma mágica, que les vamos a solucionar sus problemas, y que vamos  a conseguir un producto rentable, donde asombrados clientes nos van a llenar los bolsillos con su dinero totalmente agradecidos. Simplemente porque el producto es bueno. No necesitamos marketing.

¡Qué error!

El marketing es comunicar a nuestros usuarios allá donde estén qué problemas van a poder solucionar gracias a nuestro producto. Esto antes estaba solo al alcance de las empresas más poderosas. Las empresas que más podían invertir en campañas de publicidad. Pero hoy día Internet ha cambiado radicalmente las reglas del juego.

Antes necesitábamos grandes presupuestos para intentar llegar a masas de público que no tenían por qué ser potenciales clientes: páginas de periódico, anuncios en prensa, señalética en paradas de autobuses o imágenes de gran formato en entradas a ciudades, anuncios en radio. Todos ellos canales de precio alto donde no podíamos saber a quién llegaba nuestro mensaje, ni qué efecto o retorno de la inversión podíamos tener.

En cambio hoy, podemos crear campañas en Instagram o Facebook donde podemos segmentar brutalmente para llegar directamente a nuestros clientes potenciales, por menos de los que cuesta un menú del día. Podemos medir el impacto de nuestras campañas, lo que nos ha costado conseguir un cliente y hacerlo en tiempo real. Mejorar y optimizar nuestras campañas día a día, realizar tests, obtener datos en definitiva que nos permiten ser efectivos y mejorar en nuestra tarea de ayudar a más clientes con nuestros productos. De llegar a más personas.

Nunca hemos tenido tan al alcance de la mano hacer marketing: aprovechémoslo.

Y por favor, no confundamos marketing con otra cosa.

 

Cómo saber cuál es nuestro canal más rentable

Conocer la información de nuestro sitio web es básica para saber qué estrategia tenemos que realizar o para comprobar que nuestra estrategia está funcionando tal y como pensamos. Para ello es vital saber cual es nuestro canal de adquisición más rentable.

Qué es un canal de adquisición

Gracias a nuestra estrategia de comunicación y en nuestra estrategia de posicionamiento vamos a obtener visitas a nuestro sitio web. Estas visitas provienen por tanto de sitios diferentes, de redes sociales, de email marketing, de enlaces a nuestro sitio que están en otros sitios web, de Google cuando alguien busca contenido relacionado con nuestro sitio, etc.

Pues buen, todos estos lugares desde los cuales provienen nuestras visitas son los canales de adquisición.

El canal más rentable

En Analytics, podemos comprobar todos los datos relacionados con los canales de adquisición de nuestros visitantes. Para ello basta con ir al panel de Adquisición / Todo el tráfico / Canales.

En este informe podemos ver la cantidad de tráfico que proviene de los distintos canales, como por ejemplo:

  • redes sociales: visitas que llegan a nuestro sitio desde enlaces que están en publicaciones en redes sociales.
  • de forma directa: cuando un usuario escribe la url de nuestro sitio en su navegador.
  • de forma orgánica: a través de Google, ya sea buscando una palabra clave, o escribiendo nuestro nombre en el buscador.
  • referral: visitas que provienen desde enlaces a nuestro sitio en webs externas.
  • email: visitas que llegar a través de un enlace que está en el cuerpo de un email.
  • anuncios: tráfico que proviene de nuestras campañas de Google Adwords.

Aquí conviene que no nos quedemos en la superficie del análisis que podría ser el pensar que el canal más rentable es aquel que nos proporciona más tráfico.

Eso no es cierto.

El canal más rentable es aquel que nos trae más conversiones.

Por ejemplo: imagina que recibimos 100 visitas de Twitter y 5 de email. Podemos llegar a pensar que es más rentable para nosotros Twitter que nuestras campañas de email porque hemos recibido más visitas. Pero ¿qué ocurre si sólo 1 de las 100 visitas que ha llegado de Twitter ha acabado convirtiendo en nuestro sitio mientras que 2 personas de las 5 que nos han visitado desde el email han convertido? A todas luces, entre estos dos canales, el más rentable ha sido el canal de email.

Configura tus objetivos

Fijarnos solo en los datos de audiencia nos puede llevar a tomar una decisión estratégica errónea. Por eso es muy importante, vital, fundamental, que configures tus objetivos en Google Analytics para poder analizar todos los datos de forma correcta: en base a conversiones.

Puedes revisar la píldora donde explicamos qué es una conversión y por qué es tan importante.

Cómo saber si nuestro cliente ideal visita nuestra web

Podemos hacer una estrategia impecable de contenidos, podemos tener la mejor estructura web de cara a la conversión del mundo, podemos hacer tests A/B cada semana, pero si la audiencia que nos visita no coincide con el perfil de nuestro cliente ideal estaremos perdiendo el tiempo.

Dicho de otro modo: de nada te vale tener un millón de visitas al mes a tu web de venta de zapatos de mujer si el 90% de las visitas son hombres.

¿A quién soluciona los problemas nuestros productos o servicios?

Es la primera pregunta que debemos hacernos para tener una web efectiva. Debemos ser capaces de imaginar cómo es ese cliente ideal al que vamos a solucionar su problema. Pero tenemos que hacerlo hasta un nivel de detalle que nos permita saber edad aproximada, género, profesión, qué hace en su vida social….todo.

Todo esto, aunque parezca una perogrullada, rara vez se hace.

Comprobando la alineación entre cliente ideal y visitante de tu web.

Una vez que ya has definido tu prototipo de cliente ideal es hora de comprobar que coincide con el visitante de tu web. Para ello tenemos que ir a nuestra propiedad de Google Analytics, en la sección de «Audiencias» hay un informe de «Datos demográficos«. Aquí empiezas a tener datos interesantes como el porcentaje de hombres y mujeres que visitan tu web, franjas de edad, ubicación de tus visitantes, tanto ciudades, países como idioma.

Ahora dirígete a la vista de informa de Dispositivos móviles y observa desde qué dispositivos te visitan más.

Si tienes los objetivos configurados podrás comprobar el perfil de las personas que están convirtiendo en tu web.

Ahora con estos datos serás capaz de decir algo parecido a esto: «Los visitantes de mi sitio web son de forma mayoritaria SEXO, de edades comprendidas entre X a Y años, que conectan desde DISPOSITIVO desde las ciudades X, Y, Z«. Pues bien, te presento al visitante actual de tu web.

Con esta información responde a estas preguntas:

  • ese visitante ¿coincide con el prototipo de tu cliente ideal?
  • ¿estás recibiendo visitas de tus potenciales compradores?

Si es así, enhorabuena, has solucionado uno de los problemas más comunes de los sitios web que no convierten. Si no es así tendrás que trazar una estrategia que te permita atraer a visitantes que coincidan con el prototipo de tu cliente ideal.

El único objetivo de una web

El único objetivo de una web es comunicar a tu cliente cómo le puedes ayudar y por qué lo haces.

Tu web no puede ser una tarjeta de visita digital. Tiene que ser una plataforma donde transformar visitantes anónimos en clientes que recomienden tu marca y tu producto. Da igual que tu producto sea una app móvil, servicios de consultoría, proyectos de diseño o camisetas. El objetivo siempre tiene que ser el mismo. Y nuestro trabajo como diseñadores de producto digital es que esos sitios web comuniquen más y mejor.

Cuando nuestro producto o servicio soluciona un problema de un cliente que está dispuesto a pagar (y lo hace encantado) estamos cumpliendo nuestro objetivo. Cuando conseguimos esto, vender no es un problema.

Mira a tu alrededor: todo está lleno de páginas corporativas con textos vacíos sobre la misión y la visión de empresa que no le importan a nadie, donde decimos que somos «líderes del sector» y nos dedicamos a mirarnos el ombligo, en lugar de focalizar toda la atención en lo único que es importante: el cliente, nuestra solución a su problema. El resto son tonterías. Webs cartel. Webs vacías.

Por eso, cuando comiences el próximo proyecto web para tu cliente o para algún proyecto tuyo, antes de nada, piensa: ¿a quién va a ayudar mi producto? ¿cómo le va a ayudar? y plantea una estructura y un contenido que responda a esas preguntas. Te estarás desmarcando de toda tu competencia. Te convertirás en único.

Cómo presentar el precio de tu producto

Como en cualquier sistema de venta, el enseñar el precio de tu producto está cargado de psicología. En esta píldora voy a dar unos consejos a tener en cuenta para presentar tus precios de forma eficaz.

  • Precios cortos: por favor, el precio tiene que ser corto. Elimina los decimales. Un precio de 10€ parece menos que 10.00€. Mucho menos. Y es igual.
  • Explica todo el valor: es importante que antes de mostrar tu precio indiques claramente el valor que tiene tu producto y todos los beneficios que va a conseguir tu usuario por ese precio. Tu cliente tiene que percibir que el valor es superior al precio. Siempre.
  • Compara: sobretodo cuando hablamos de precios altos, puedes ayudarte de comparaciones para que se puedan asimilar correctamente por parte de tu cliente. No es lo mismo que te diga que mi producto vale 30€, así sin mas. En seco. A que diga: «puedes tener todos estos beneficios por sólo 30€ al mes. Menos de un café al día«.
  • El bueno, el feo y el malo: ofrece dos opciones peores que el precio que quieres ofrecer. Por comparación será la que elijan tus usuarios. Por ejemplo, si ofreces un producto más barato que el precio que tienes en mente pero muy limitado, y otro producto con precio muy alto pero con muy pocas características más que el producto que te interesa vender, se lo estás poniendo muy fácil a tu cliente para elegir.
  • Nunca mientas: bajo ningún concepto. Nunca. No mientas sobre el precio de tu producto. No escondas incrementos, sobrecostes o cargos adicionales.
como-presentar-precio
El bueno, el feo y el malo según Evernote.

Qué es el CTR y cómo medirlo

El CTR, la clave del SEO en nuestro sitio

Como sabes, el objetivo de Google es que los usuarios encuentren lo que están buscando lo más rápido posible.

Para ello cuando un usuario busca por algún término, Google le muestra un listado de resultados, ordenados en función de lo que Google cree que es la mejor respuesta para ese término.

¿Y cómo identifica Google que un sitio es relevante para una palabra clave? Pues entre algunas otras cosas, mediante el CTR.

Vale, pero qué es el CTR

El CTR es la relación entre la cantidad de veces que Google muestra tu sitio como resultado de búsqueda de un término y la cantidad de usuario que hacen click en él.

Esto para Google es una muestra de éxito, una señal de que el sitio donde ha hecho click tiene relación directa y es relevante con respecto al término que el usuario está utilizando.

¿Cómo se cuál es el CTR de mi sitio para algunos términos?

Para saber cual es tu CTR tienes que mirar en Google Search Console (o cómo Jobs quiera que se llame ahora…).

En el apartado de Rendimiento, podemos ver una gráfica donde nos muestra los términos de búsqueda para los cuales Google nos está mostrando, así como el total de impresiones y clics, pudiendo obtener así el CTR:

El CTR según Google Search Console
El CTR según Google Search Console

En el ejemplo de la imagen vemos que para el término «recortar imagen circular» tenemos un CTR de 4,6%. Mientras que para el término «recortar fotos en círculo online gratis» tenemos un CTR de 12,16%.

Cómo mejorar mi CTR

La mejor forma de mejorar tu CTR no es pensar en Google, sino en tus usuarios, en lo que están buscando y lo que tú les estás ofreciendo.

Cuando Google te muestra como resultado va a enseñar el contenido de tu etiqueta title y de la meta etiqueta name="description".  Ambas etiquetas HTML las puedes encontrar en el head de tu sitio.

Así que ponte en la piel de tu usuario y piensa qué puedes escribir para que tu usuario sepa que tu sitio es el que está buscando, para que de esta forma cuando Google te muestre, los usuarios hagan clic y por tanto suba tanto tu CTR como tu posición para esa palabra clave.

Recuerda ver el impacto de tus cambios en tus etiquetas con el paso del tiempo y comprobar gracias a Google Search Console, que tu CTR y la posición de esa palabra clave va mejorando con el tiempo.

Qué son las UTM y para qué sirven

Qué son las UTM

Seguro que en más de una ocasión has visto al hacer clic en un enlace de un email o en un tweet, que la url de destino lleva un montón de caracteres raros. Pues esas son las UTM.

Las UTM son variables que se añaden a una URL y que nos sirven para monitorizar o trackear en Analytics de donde viene exactamente una visita a nuestra web.

La importancia de las UTM en nuestras campañas de marketing online

Cuando trazamos una estrategia de marketing online para nuestro producto, generalmente estamos realizando diversas actuaciones en diferentes medios o canales.

Por ejemplo, imaginemos una campaña de «Black Friday» donde estamos anunciando un descuento de precio en un nuevo producto. Para comunicar nuestra campaña podemos utilizar un mailing, una serie de tweets en Twitter durante los 5 días anteriores, varias publicaciones en Instagram y LinkedIn, así como un pequeño anuncio de 5 días en Adwords.

La mejor forma de medir el impacto y la efectividad de todas estas acciones es mediante el uso de UTM, ya que Google Analytics va a crear una sección específica (en el panel de Adquisición / Campañas) donde recoge todos los datos de nuestra campaña (si usamos UTMs) y nos va a dar información de alto valor como por ejemplo: el canal que más conversiones ha tenido, o el enlace del mailing que más conversiones finales ha tenido en la web.

Toda esta información nos va a ser de alto valor ya que nos permite mejorar nuestras estrategias y poder evaluar el retorno de la inversión del total de la campaña.

¿Qué variables podemos añadir a nuestras URLs?

  • Nombre de la campaña (utm_campaign): nombre con el cual vamos a identificar nuestra campaña. Por ejemplo: «black-friday-2018».
  • Fuente de la campaña (utm_source): fuente de donde proviene el tráfico. Por ejemplo: «email-dia-1», «email-final», «tweet-01».
  • Medio de la campaña (utm_medium): medio de destino del tráfico. Por ejemplo: «mailing», «twitter».
  • Contenido de la campaña (utm_content): para identificar el contenido donde se hizo click. Por ejemplo: «top-banner», «inline-cta-01».
  • Términos de la campaña(utm_term): para identificar las palabras clave en caso de anuncios.

¿Cómo crear nuestras UTM y usarlas?

Para crear nuestras UTM podemos utilizar el constructor de URLs que Google pone a nuestra disposición de forma gratuita.

Creando UTMs gracias al constructor de URLs de Google
Creando UTMs gracias al constructor de URLs de Google

Una vez completado el formulario con las variables que nos interesen solo tenemos que copiar la url generada y usarla en nuestra acción de marketing específica. Cada vez que un usuario llegue a nuestra web pulsando ese enlace, quedará monitorizado y podremos saber si ha producido una conversión o no.

Cómo simular el coste y el impacto de una campaña de Google Ads

Da igual que seamos product designer freelance o una agencia de desarrollo de software. No importa que tengamos una app en la AppStore o una aplicación web de comparativa de libros electrónicos. Si queremos crecer, tendremos que crear campañas.

Y uno de los aspectos clave antes de crear una campaña es prever el impacto que podemos obtener y el coste de la misma.

En la píldora de hoy vamos a analizar el coste y el impacto de una campaña realizada en Google Ads.

Los cambios en Google Ads

Desde hace unos meses, si no tienes ninguna campaña activa en tu cuenta de Google Ads, no podrás tener datos exactos en cuanto al volumen de datos, y por tanto tendremos que manejar horquillas de valores. Aun así es un dato más que suficiente para hacernos una idea de cómo puede ser nuestra campaña.

Cuando creamos una campaña de Google Ads, lo que creamos son resultados de búsqueda patrocinados o de pago para ciertas palabras clave por las cuales vamos a pujar. Es importante decir que Google no nos va a cobrar hasta que un usuario haga «clic» en el anuncio y vaya a nuestra web, por ejemplo. Pero más importante es señalar que se trata de un sistema de puja, y quién más pague saldrá en primera posición, lo que supone una mayor probabilidad de que nuestros potenciales clientes visiten nuestro anuncio.

Un ejemplo

Con este contexto vamos a ver un pequeño ejemplo. Supongamos que vamos a hacer una campaña para atraer clientes que están buscando un diseñador web.

Desde Google Ads podemos añadir la palabra clave «diseñador web» y nos arrojará estos resultados:

Cómo simular el coste y el impacto de una campaña de Google Ads
Información de Google Ads para una palabra clave

Nuestra palabra clave tiene entre 1.000 y 10.000 búsquedas mensuales en España, y cada clic nos va a costar entre 0,64€ y 3,15€.

Suponiendo que nuestro anuncio va a llevar a posibles y potenciales clientes a nuestra web o a una landing page, lo que tendremos que conocer es nuestro porcentaje de conversión en ese lugar. Supongamos en nuestro ejemplo que tenemos un 1% de conversión. Esto es, 1 de cada 100 visitantes de nuestra web nos acaba comprando o contratando nuestro servicio.

Pues con esos datos tenemos las siguientes certezas:

  • Necesitamos llevar al menos 100 usuarios a nuestra web para conseguir 1 conversión.
  • Llevar 100 usuarios nos va a costar entre 64 y 315€.
  • Una venta nos puede costar entre 64 y 315€.
  • Para optimizar nuestra campaña nuestro CPC (coste por clic) medio debería estar cerca de los 0,64€.

Lo importante de este análisis es que nos indica qué rendimiento podemos esperar antes de lanzar nuestras campañas y cuánto nos puede costar cada venta.

Debemos usar estos datos como una referencia de si lo estamos haciendo bien o si debemos optimizar más.